viernes, 27 de octubre de 2017

¿Babilonia? ¿Asiria? ¿Hatti?... Hacia una descripción geográfica del Oriente Próximo antiguo

Rascafría, 27 de octubre de 2017

Queridos lectores: hoy inauguramos el blog. Y lo hacemos con la primera de las entradas de carácter introductorio para situarnos en el tiempo y en el espacio. ¿Qué es lo que vamos a ver hoy? La geografía del Oriente Próximo y la ubicación de cada uno de los núcleos que protagonizaron la historia de este lugar. ¿Y por qué es importante conocer esto? Porque el Oriente Próximo antiguo es un territorio más variado de lo que se pueda pensar en un principio y eso va a ser un valor determinante en ciertos aspectos. Así que, seguid leyendo y descubriréis que Oriente Próximo es mucho más que Mesopotamia.

Geografía y límites del Oriente Próximo antiguo


Las particulares características geográficas del territorio han permitido definir una serie de límites naturales que engloban lo que fue el núcleo de desarrollo de lo que conocemos como Oriente Próximo antiguo. Estos límites son los siguientes:
  • Oeste: el mar Mediterráneo.
  • Noroeste: el mar Negro.
  • Norte: el Cáucaso y las estepas de Asia Central.
  • Sur: el desierto de Arabia.
  • Este: el Golfo Pérsico y la meseta de Irán (aunque aún no hay unos límites bien definidos dentro del marco iraní).
Cabe señalar que a pesar de haberse establecido estos límites para el desarrollo del Oriente Próximo, esto no quiere decir que no hubiera contactos (del tipo que fueren) con zonas situadas más allá de estos puntos geográficos.


Como podéis observar en el mapa, y en los propios límites que acabamos de comentar, el territorio del Oriente Próximo es tremendamente variado. Contamos con las regiones fértiles bañadas por los ríos Tigris y Éufrates en su curso medio y en su desembocadura en el Golfo Pérsico; con las regiones boscosas del norte de Anatolia y parte de Irán; con las regiones desérticas de Arabia, Siria y el Irán interior; con la región mediterránea de la costa siro-palestina; y con las regiones montañosas del Tauro, los Zagros, el Cáucaso, los Elburz y el Sinaí.

Esta variedad geográfica se ve, asimismo, complementada por una variedad climática. Estudios sobre el clima han demostrado que desde hace unos 10.000 años el clima en toda esta región se ha mantenido con pocas variaciones. Esto nos indica que los hombres de la Antigüedad tenían que hacer frente a prácticamente los mismos problemas y tenían que adaptarse a la misma climatología que un hombre moderno.

¿Y cuál es esa climatología? Pues bien, como podéis observar, las regiones montañosas no pueden tener el mismo clima que las desérticas, y así sucesivamente. Por lo que tenemos una región mediterránea caracterizada por un clima suave con lluvias abundantes en invierno; mientras que en las zonas desérticas de Siria y Arabias, las precipitaciones serán muy escasas y contrastarán con zonas de clima de alta montaña. En la zona de Mesopotamia las lluvias suelen ser escasas e irregulares, y la fertilidad vendrá favorecida por el deshielo. Este tiene lugar en una primavera que se inicia en febrero y trae consigo una crecida catastrófica de los ríos (lo que les llevó a realizar diversas obras de ingeniería hidráulica para poder hacer aprovechable este fenómeno). En la zona de Yazira (lo que tradicionalmente se ha llamado 'Alta Mesopotamia') las tierras agrícolas son particularmente buenas, ya que tienen lluvias durante la primavera y el otoño, y los inviernos suelen ser cortos, rigurosos y con nieve.

Todas estas diferencias es importante conocerlas porque van a influir en dos puntos fundamentales: el carácter de la población y el acceso a los recursos naturales. Y este segundo aspecto, a su vez, influirá en la búsqueda de contactos y el establecimiento de rutas comerciales.

Pero ¿de qué recursos podían disponer? ¿Y desde dónde podían disponer de ellos? Aquí os dejo una pequeña lista de los principales productos y su lugar de origen:
  • Madera: procedía de los montes de Siria y Líbano, y de las estribaciones de los Montes Zagros.
  • Cobre: del sector oriental de Anatolia, de Omán y Chipre.
  • Oro y Plata: también de Anatolia, del NE y centro de Irán, las regiones del Cáucaso y Arabia, y más escasamente de Nubia.
  • Estaño: de Irán y Afganistán.
  • Hierro: de Anatolia, Armenia, Cáucaso y S de Irán.
  • Piedras preciosas: como jadeita, lapislázuli, obsidiana, turquesa, hematita, basalto, diorita, alabastro, etc. podían proceder de lugares tan diversos como Afganistán, Anatolia, Irán, Sinaí y Omán.
* * * * *

Con el territorio del Oriente Próximo establecido, queda ahora establecer un listado con las regiones y las culturas que se desarrollan en cada una de ellas y así tenerlas ubicadas en el espacio para las futuras entradas.



Mesopotamia y Yazira


Tradicionalmente para referirse a estas dos regiones, que aquí las tenemos unidas, se ha hablado de Alta Mesopotamia y Baja Mesopotamia. No es que esté mal dicho así, de hecho en mucha bibliografía se siguen empleando estos términos. Sin embargo, la denominación más correcta sería la de Mesopotamia para la tradicional Baja Mesopotamia o lo que será Babilonia, y Yazira para la Alta Mesopotamia o el territorio de Asiria.

La zona de Mesopotamia será el núcleo del Oriente Próximo antiguo ya que es dónde empezarán a desarrollarse las primeras ciudades estado y donde surgirá Sumer, el Imperio de Acad y la posterior Babilonia que, con altibajos, ocupará esta región hasta la invasión persa.

Pero no solo encontraremos en esta región las tierras de Asiria y Babilonia, pues también tendremos a los siguientes protagonistas:
  • Culturas de Hassuna-Samarra, Halaf y Obeid.
  • Uruk, Tell Brak, Urkis y Nagar.
  • Ciudades estado sumerias.
  • Acad.
  • Isin, Larsa, Esnunna.
  • Babilonia.
  • Mitanni.
  • Asiria.

Irán


En Irán destaca la región que se conoce como el Elam, en la frontera con Babilonia, y cuya capital se sitúa en la ciudad de Susa. Pero también se desarrollan los siguientes emplazamientos:
  • Tepe Hissar.
  • Tepe Giyan.
  • Tepe Sialik.
  • Susa.
  • Marhasi.

Anatolia


  • Göbleki Tepe, Nevali Çori, Çatal Hüyük.
  • Malatya.
  • Hatti.
  • Reinos luvitas.
  • Urartu, Frigia y Lidia.

Siria y Palestina


  • Mureybet, Halula y Halaf.
  • Habuba Kabira.
  • Ebla.
  • Mari.
  • Qatna.
  • Ugarit.
  • Reinos luvitas y arameos.

Península Arábiga


Hasta hace muy poco no se consideraba como parte del escenario del Oriente Próximo antiguo, pero las últimas excavaciones en esta región han demostrado que, efectivamente, había contactos entre los núcleos tradicionales próximo orientales y zonas de Arabia.
  • Culturas de Umm an Nar y Wadi Suq.
  • Qalat al Bahrein.
  • Dilmún y Magán.
  • Reino de Saba.
  • Ma'rib.
¡Gracias por leer!
¡que Nabu os acompañe!

BIBLIOGRAFÍA:
  • González-Wagner, C. (1993), El Próximo Oriente antiguo, vol. I, Síntesis, Madrid.
  • Sanmartín, J. y Serrano, J.M. (2006), Historia antigua del Próximo Oriente. Mesopotamia y Egipto, Akal Textos, Madrid.
  • Van de Mieroop, M. (2007), A History of the Ancient Near East. Ca. 3000-323 B.C., 2ª ed., Blackwell Publishing, Oxford.
  • Bertman, S. (2003), Handbook to life in Ancient Mesopotamia, Facts on File INC, New York.
  • Kuhrt, A. (2000), El Oriente Próximo en la Antigüedad (3000-330 a.C.), vol. I, Crítica, Barcelona.

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